Acuicultura

Profilaxis de estreptococosis en acuicultura: Vacunas y manejo

La estreptococosis en peces es una de las principales enfermedades infecciosas en la acuicultura de agua dulce y marina. Esta condición afecta el desarrollo sustentable de la acuicultura en todo el mundo. Además, es una enfermedad zoonótica, con consecuencias significativas para la seguridad alimentaria.1

La enfermedad estreptocócica en peces fue reportada por primera vez en 1957, afectando a la trucha arcoíris cultivada en Japón. Desde entonces, se han encontrado varias especies de peces susceptibles a esta infección, incluidos el salmón, el salmonete, la carpita dorada, sargo, anguila, trucha de mar, tilapia, esturión y lobina rayada.2

Epidemiología

Las infecciones por estreptococos en peces pueden causar altas tasas de mortalidad (> 50%), en un periodo de 3 a 7 días. En casos crónicos, los brotes pueden extenderse durante varias semanas, con una muerte diaria de uno a más de dos peces.2

La estreptococosis es una enfermedad multifactorial en peces. Esta depende de la variedad del huésped, la edad, el estado inmunitario, el tipo de patógeno (especie y cepa) y las condiciones ambientales.3

Altas temperaturas, densidades de siembra intensivas, y malas prácticas de bioseguridad y producción son factores que favorecen la enfermedad, impactando todo el ciclo de producción, ocasionando altas mortalidades sobre todo en la etapa de engorde. Por esta razón, la estreptocosis es considerada una de las enfermedades de más alto impacto tanto económico como biológico. 

La estreptococosis no se limita a una región geográfica específica, ya que ha sido reportada por todo el mundo. Casos documentados en Europa, América, Oriente Medio, Asia y Australia.3,4 destacan la presencia de diversas especies de Streptococcus (S. parauberis, S. iniae, S. agalactiae, Lactococcus garvieae, S. dysgalactiae y Vagococcus salmoninarum) en diferentes partes del mundo.3,5

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Etiología

La estreptococosis de los peces es un conjunto de enfermedades similares causadas por diferentes géneros y especies que tienen la capacidad de afectar el sistema nervioso central. Se caracteriza por la presencia de exoftalmia supurativa y meningoencefalitis.5

El principal modo de transmisión de la estreptococosis en peces es horizontal. Esta ocurre a través del agua, donde los peces portadores actúan como fuente de infección. Además, se ha observado que la ingestión de material infectado puede ser un modo de transmisión oral.4

Existen dos tipos de estreptococosis:

  • de aguas cálidas, que causa mortalidad a temperaturas superiores a 15 °C. Suele ser causada por L. garvieae, S. iniae, S. agalactiae y S. parauberis.
  • de aguas frías, que se produce a temperaturas inferiores a 15 °C. Es causada por L. piscium y V. salmoninarum.

Los agentes etiológicos de la estreptococosis de las aguas cálidas también se consideran posibles agentes zoonóticos, capaces de provocar enfermedades en el ser humano.5

Los Streptococcus spp., clasificados como estreptococos del grupo B (GBS), son bacterias Gram-positivas causantes de la estreptococosis, tanto en animales terrestres como peces.

Las principales especies de Streptococcus spp. que infectan a los peces son S. iniae, S. difficile, S. agalactiae, S. parauberis, S. dysgalactiae y S. Shilo.5 Streptococcus iniae y S. agalactiae son los principales causantes de la infección bacteriana, y que tienen un efecto devastador sobre la tasa de supervivencia en la producción mundial de tilapia.5

Actualmente, en Latinoamérica los principales causantes de estreptocososis en producciones de peces de agua cálida, como la tilapia, son 3 serotipos de Streptococcus agalactiae (Ia, Ib y III), Streptococcus iniae y Lactococcus spp.

Acuicultura

Cuadro clínico

Los peces afectados por la estreptococosis pueden mostrar uno o más de los siguientes signos clínicos:

  • natación errática (en espiral o giratoria);
  • pérdida del control de la flotabilidad;
  • letargo;
  • oscurecimiento;
  • exoftalmía unilateral o bilateral;
  • opacidad corneal (ojos blanquecinos);
  • hemorragias en o alrededor del ojo, la placa branquial, la base de las aletas, el ano, sobre el corazón o en cualquier otra parte del cuerpo;
  • ascitis (hidropesía/hinchazón); y
  • ulceraciones.2

De los signos mencionados, la hemorragia, los ojos saltones, los giros y la mortalidad que progresa rápidamente se encuentran entre los hallazgos más frecuentes.2,5

Un examen interno puede revelar la presencia de fluidos teñidos de sangre en la cavidad corporal, un bazo agrandado y enrojecido, así como un hígado pálido. Además, se puede observar inflamación alrededor del corazón y los riñones.

Muchos estreptococos tienen la capacidad de infectar el cerebro y el sistema nervioso de los peces. Esto explica el nado errático que se observa con frecuencia en los peces infectados.2,5

Profilaxis y vacunación

Desinfección

Las enfermedades estreptocócicas en los peces afectan, inicialmente, la piel, las aletas, las branquias y los órganos externos. Por lo tanto, controlar las infecciones externamente mediante el uso de desinfectantes líquidos que se disuelven fácilmente en el agua, como el sulfato de cobre y la formalina, son una buena opción. Sin embargo, estos agentes causan efectos secundarios ambientales peligrosos4 y no son suficientes para controlar o reducir el impacto de la enfermedad. 

Antibióticos

Los antibióticos se han utilizado para controlar las infecciones por Streptococcus spp en peces. A menudo se emplean varios antibióticos, como florfenicol, eritromicina, doxiciclina y oxitetraciclina, sin embargo, en Latinoamérica sólo el Florfenicol y la oxitetraciclina están aprobados para uso por la FDA.

El tratamiento con antibióticos puede causar problemas importantes, debido a las reinfecciones por los patógenos que requieren tratamientos frecuentes. Estos problemas incluyen la acumulación de antibióticos en los cadáveres de peces, y la liberación de fármacos en los ecosistemas acuáticos, aumentando la probabilidad de resistencia bacteriana1

Los antibióticos deben usarse cuidadosamente con respecto a la concentración utilizadas, a las especies de peces y especies bacterianas objetivo.6

Sin embargo, se debe considerar que la mayoría de los antibióticos aprobados para uso acuícola son de aplicación vía oral, una vez que una población está enferma uno de los principales signos clínicos es la reducción del apetito, haciendo difícil la dosificación adecuada para lograr la recuperación exitosa del lote, por lo que los tratamientos con antibióticos, hoy en día, se consideran poco efectivos para el control de la enfermedad. 

Fitoterapia

Existe un creciente interés por el uso de suplementos dietéticos o aditivos capaces de mejorar la salud de los peces. Esto se debe, principalmente, por la demanda mundial de productos acuícolas libres de químicos.1

Las hierbas medicinales y otras plantas pueden ser una buena alternativa para evitar el uso de antibióticos en la acuicultura debido a sus numerosos beneficios. Principalmente, estos pueden mejorar el crecimiento, la actividad antioxidante, condiciones fisiológicas y estado de bienestar de los peces. Además, tiene efectos antimicrobianos e inmunológicos y efectos hepatoprotectores.

El uso de fitoterapia en compañía de buenas prácticas de bioseguridad y vacunación individual es una de las estrategias más eficientes para el control de la enfermedad. 

Vacunas

Actualmente, la vacunación es una de las estrategias más efectivas contra enfermedades patógenas en la acuicultura. Gracias a las vacunas, se han reducido los brotes de enfermedades y el uso de antibióticos dentro de las industrias acuícolas.6

El estado de salud de las crías de los peces reproductores depende tanto de su salud como de su estado inmunitario. La transferencia de inmunidad materna es una de las alternativas para aumentar la inmunidad de la descendencia y mejorar su tasa de supervivencia, sin embargo, limitar la protección a los reproductores dejará desprotegido al resto de la población quienes estarán en un mayor desafío dentro de la producción intensiva de engorda.

Varios estudios han señalado que los factores inmunitarios pueden transferirse de los reproductores a las crías mediante anticuerpos, lisozimas, inhibidores de la proteasa y factores del complemento.7 En la actualidad, la inmunización de los peces reproductores con vacunas monovalentes ha demostrado la transferencia de inmunidad a la descendencia. Este es el caso en especies como el rodaballo, la dorada, el pez cebra, el bagre y la tilapia.8-16

La estreptococosis en peces es una de las principales enfermedades infecciosas en la acuicultura de agua dulce y marina.

La inmunización de los peces reproductores con una vacuna monovalente contra S. agalactiae seguida de una exposición a la misma bacteria, y la inmunización con una vacuna contra A. hydrophila seguida de una exposición a esta, podrían aumentar la inmunidad y brindar una mayor protección a las crías provenientes de los peces reproductores inmunizados.12,14 

En 1995, se realizó la primera prueba exitosa de una vacuna inactivada con formalina contra S. agalactie en tilapias. Esta vacuna, fue administrada por vía intraperitonealmente (IP), y demostró capacidad de protección en tilapias contra una exposición 100 veces la dosis letal media (DL50). Desde entonces, se han utilizado vacunas inactivadas para controlar la infección por S. agalactiae en tilapia.5,7,8

Las vacunas comerciales para tilapia contra la estreptococosis están actualmente disponibles en muchos países y son ampliamente utilizadas.

Para conocer más sobre este tema y otros avances en la acuicultura, explora otros artículos disponibles haciendo clic aquí.

Bibliografía

  1. Van Doan H, Soltani M, Leitão A, et al. Streptococcosis a Re-Emerging Disease in Aquaculture: Significance and Phytotherapy. Animals 2022;12:2443.
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  3. Mishra A, Nam GH, Gim JA, et al. Current challenges of Streptococcus infection and effective molecular, cellular, and environmental control methods in aquaculture. Mol Cells 2018;41:495–505.
  4. Shoemaker CA, Lafrentz BR, García JC, et al. 1.3.3 Streptococcosis in Fish. In: AFS-FHS (American Fisheries Society-Fish Health Section). FHS Blue Book: suggested procedures for the detection and identification of certain finfish and shellfish pathogens. AFS-FHS, Bethesda, Maryland. A., 2020;1–10. Available at: chrome-extension://efaidnbmnnnibpcajpcglclefindmkaj/https://units.fisheries.org/fhs/wp-content/uploads/sites/30/2020/07/1.3.3-Streptocoocal-2020.pdf.
  5. El-Noby GA, Hassanin M, El-Hady M, et al. Streptococcus: A review article on an emerging pathogen of farmed fishes. Egypt J Aquat Biol Fish 2021;25:123–139.
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  14. Sukenda, Pratiwi KA, Rahman, et al. Efficacy of whole cell vaccine Aeromonas hydrophila on catfish broodstock and it’s offspring resistance againt motile aeromonad septicemia (MAS). J Akuakultur Indones 2017;16:92–100.
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  16. Nisaa K, Sukenda, Zairin M, et al. FRY tilapia (Oreochromis niloticus) antibody improvement against Streptococcus agalactiae through broodstock vaccination. Pakistan J Biotechnol 2017;14:9–16.
  17. Liu G, Zhu J, Chen K, et al. Development of Streptococcus agalactiae vaccines for tilapia. Dis Aquat Organ 2016;122:163–170.18. Eldar A, Shapiro O, Bejerano Y, et al. Vaccination with whole-cell vaccine and bacterial protein extract protects tilapia against Streptococcus difficile meningoencephalitis. Vaccine 1995;13:867–870.