Cómo corregir la deficiencia de minerales en bovinos y su impacto en el periparto de las vacas
30 noviembre 2021
La deficiencia de minerales en bovinos está relacionada con la reducción de la productividad del rebaño y con importantes impactos económicos. Este problema se observa con frecuencia en el periparto de las vacas, período en el que se producen cambios endocrinos y nutricionales abruptos que aumentan la predisposición a trastornos posparto y enfermedades como la hipocalcemia puerperal.
Un estudio realizado por el Núcleo de Pesquisa, Ensino e Extensão em Pecuária da Universidade Federal de Pelotas apunta a un parámetro que muestra cómo los niveles desiguales de estos micronutrientes en el periparto son expresivos. Según la investigación, la fase de lactancia supone un aumento brusco de la demanda de calcio, puesto que una vaca que produce 10 kg de calostro eliminará 23 g de calcio en un ordeño, lo que representa nueve veces la cantidad de calcio que circula en su organismo.
En este sentido, el periparto en las vacas exige un cuidado extra en lo que respecta al manejo nutricional, ya que la deficiencia de minerales compromete el buen funcionamiento del tejido reproductivo y posibilita la aparición de enfermedades. Pero, al final, ¿cómo corregir el déficit de estos nutrientes en bovinos?
La deficiencia de minerales en bovinos puede provocar trastornos reproductivos y del comportamiento
Antes de abordar el tema de cómo prevenir las deficiencias minerales en bovinos, es necesario enfatizar la importancia de estos nutrientes para la salud animal. Según un artículo publicado en la Revista Agronomia Brasileira da UNESP, los minerales ejercen innumerables funciones vitales en el organismo e intervienen en casi todas las vías metabólicas. Estos nutrientes constituyen, por ejemplo, los tejidos blandos y los fluidos corporales y también participan en el desempeño reproductivo y en el mantenimiento del crecimiento y la función inmunológica.
La deficiencia de fósforo, por ejemplo, está relacionada con la reducción de la ingesta de alimentos, lo que, en consecuencia, puede provocar un déficit de otros nutrientes. Otro efecto grave de la deficiencia de fósforo es la alotrofagia, comportamiento caracterizado por la ingestión de materiales inapropiados para la alimentación, como huesos, piedras y madera, lo que aumenta la susceptibilidad de los bovinos a desarrollar botulismo enzoótico.
Las bajas concentraciones de manganeso también causan daños importantes a la salud del ganado, ya que este mineral es esencial para el desarrollo óseo y el buen funcionamiento reproductivo. Por lo tanto, la deficiencia de manganeso induce trastornos como disminución de la fertilidad, desarrollo folicular deficiente, ovulación retardada, mayor incidencia de abortos espontáneos y engrosamiento de las articulaciones.
Por lo tanto, el uso de suplementos minerales para bovinos de carne y vacas en el periparto es una estrategia válida para evitar el déficit de minerales. El estudio realizado en la Universidade Federal de Pelotas destaca que la mineralización en vacas lecheras tiene como principal objetivo la mejora del desempeño reproductivo, a través de la reducción del intervalo entre partos y el aumento de la tasa de concepción. El estudio también señala que la calidad de la leche se ve beneficiada, puesto que la suplementación actúa en la reducción de células somáticas.
Además de esos beneficios, el uso de suplementos minerales estimula el sistema inmunológico y las respuestas antioxidantes de las vacas lecheras. Así se concluyó en un estudio de la Academia Brasileira de Ciências, donde se administró un complejo mineral subcutáneo con magnesio, fósforo, potasio, selenio y cobre a doce vacas preñadas, mientras que seis animales se utilizaron como grupo control. El resultado fue un menor nivel de estrés oxidativo en el período posparto, así como una mejor respuesta inmune.
Los suplementos también están indicados para bovinos deficientes en minerales porque ayudan a alcanzar niveles adecuados de ingesta de nutrientes. Es común que en granjas con ganado en esta condición, la provisión de alimentos sea abundante, pero generalmente esta estrategia no es suficiente para revertir la escasez de minerales.
La deficiencia de minerales en bovinos generalmente se manifiesta de manera silenciosa
Aunque la deficiencia de minerales en bovinos es perjudicial para el desempeño reproductivo, este déficit no siempre desencadena signos clínicos. Este argumento está respaldado por un artículo publicado en The Canadian Veterinary Journal, que reconoce que los síntomas vagos e inespecíficos contribuyen a que este problema no se diagnostique hasta que se identifiquen las pérdidas.
Por lo tanto, el manejo nutricional y la suplementación deben realizarse de antemano. De esta forma, se minimizan los riesgos de que el ganado presente deficiencias de minerales y, en consecuencia, pérdida en el rendimiento reproductivo. A su vez, se garantiza una adecuada ingesta nutricional y se evita el desarrollo de enfermedades en el rebaño.
Cabe señalar que las dietas formuladas para el ganado deben satisfacer sus necesidades nutricionales, evitando excesos o deficiencias, ya que la nutrición puede afectar la eficiencia reproductiva de los bovinos. Idealmente, los veterinarios deben realizar evaluaciones clínicas en el rebaño para monitorear los niveles de minerales en el organismo y así brindar un manejo nutricional adecuado y adoptar el uso de suplementos cuando sea necesario, especialmente en períodos más críticos, como el periparto en las vacas.