Los impactos del reovirus aviar en la salud animal y en la productividad de la granja
23 febrero 2022
El reovirus aviar es una de las principales amenazas de las granjas y, a pesar de encontrarse en diversas especies, las gallinas y pavos son los únicos huéspedes naturales. La inmunosupresión causada por el virus puede resultar en una serie de enfermedades de gallinas. Las más comunes son la artritis viral y el síndrome de la mala absorción. Estos problemas tienen un impacto imponente en la productividad, por lo tanto, es indispensable tomar medidas preventivas contra el reovirus.
Los síntomas del reovirus son el resultado del efecto inmunosupresor
El reovirus actúa de forma más grave en el organismo de los huéspedes naturales. El virus se difunde por todo el organismo, causando inmunosupresión y señales clínicas en diversas regiones, como en las articulaciones, pulmones, corazón e intestino. «Los efectos inmunosupresores en las gallinas hacen que presenten dificultad en el desplazamiento, pudiendo o no haber claudicación, necrosis de la cabeza del fémur y/o rompimiento del tendón gastrocnemio (tal afectación se altera según la intensidad de la enfermedad), es decir, puede causar procesos inflamatorios crónicos», afirma la veterinaria Adrieli Biavatti.
La falla en el sistema inmunológico tiene como resultado una serie de problemas de salud. La artritis viral y el síndrome de la mala absorción son las enfermedades más comunes causadas por el reovirus aviar, sin embargo, la lista de riesgos es larga. «La presencia de otros agentes como Escherichia coli, Mycoplasma synoviae, Mycoplasma meleagridis y Staphylococcus aureus, puede agravar aún más el cuadro, debido al aumento de la susceptibilidad ya que causa inmunosupresión, aumentando, en consecuencia, la morbilidad, el síndrome de mala absorción y la eliminación de las aves», agrega Adrieli.
El reovirus afecta la conversión alimenticia y la producción de huevos
Las señales clínicas causadas por el reovirus aviar tienen como resultado una serie de alteraciones en la productividad. De acuerdo con la veterinaria, los problemas motores hacen que las aves permanezcan en decúbito ventral la mayor parte del tiempo y no logren llegar hasta el comedero o bebedero. Las consecuencias son la reducción o retraso del crecimiento y el desarrollo, las cuales se perciben por la baja ganancia de peso y conversión alimentar y la falta de uniformidad del lote. «Otra característica del virus es su actuación en la reducción de la motilidad intestinal, dificultando la absorción de nutrientes y de agua. Estas funciones son de suma importancia para que las aves puedan expresar todo su potencial genético y de desempeño», afirma Adrieli.
La veterinaria explica de qué forma el reovirus aviar afecta la producción de la granja: «Debido al hecho de que las aves presentan las señales críticas citadas anteriormente, se puede afectar la producción de carne y huevos ya que reduce y/o atrofia las vilosidades intestinales, lo cual causa una disfunción, puesto que los cambios en el medio intestinal pueden predisponer el aparecimiento de enfermedades (a causa de la colonización por microorganismos patogénicos, virus o bacterias oportunistas)».
La prevención y el control del reovirus aviar deben realizarse con vacunación y medidas de bioseguridad
Uno de los mayores desafíos presentados es la resistencia del reovirus en el ambiente. Por esto, la mejor estrategia es actuar de forma preventiva. «Es necesario enfocarse en medidas de prevención del agente, con refuerzo de la bioseguridad, inmunización, desinfección y vacío sanitario», dice Adrieli. La principal forma de control de la infección del reovirus en aves es la vacuna, la cual puede aplicarse en pollos desde el primer día de vida. Los procedimientos de bioseguridad de limpieza y desinfección deben realizarse siempre en conjunto con la vacunación para reducir las tasas de contaminación.
Los cuidados deben ser minuciosos, ya que el efecto inmunosupresor del reovirus aviar hace que las gallinas queden más susceptibles a otros patógenos, como los virus de la enfermedad de Marek y la de Newcastle.
* Adrieli Biavatti (CRMV: 17487) es graduada en Medicina Veterinaria de la Universidade Federal da Fronteira Sul y cursa un MBA en Producción Avícola en el Instituto DiDatus.